El largo viaje acaba. Voy a verte.
Después de leguas, lustros, polvo y aire,
y saudades y sombra pasajera.
Y allí estás tú, y sonriendo, (tu eterna sonrisa)
y aquí mis ojos que te desconocen,
y entre los dos, el mar, las estaciones.
Pero me acerco a la que me sonríe,
y le pido perdón a su mirada
porque no soy el joven que ella tuvo.
Se abraza a mí, y me besa, la bella,
y la siento temblar igual que otrora,
y endereza sus labios a mis lágrimas.
El largo viaje acaba. Somos otros.
Nada parece real, todo es un sueño,
llegar, ver y escaparnos del olvido.
Por fin podré decirte:
Nunca dejé de quererte…
No hay comentarios:
Publicar un comentario